viernes, 14 de octubre de 2022

Vivimos al límite

Vivimos al límite. Vamos media hora antes para no pillar caravanas y nos acostamos a las 10 de la noche, reventados de puro vivir al límite. Hace un par de días fue mi santo (gracias por no felicitarme, mamones); y, casualmente, se me cayó una pestaña y soplé, por supuesto, pidiendo un deseo. No se deben, ya saben, contar los deseos, pero aquí eso no importa porque esto es un suburbio de un suburbio de un barrio extraperimetral dejado de la mano de dios, y no lo lee nadie. Menos el proveedor de deseos. En fin. Deseé pasar una tarde-noche-amanecer como los de antes. Con risas, minifaldas, tocamientos, cervecitas, calor y que la cuenta la pague otro (por si la cosa se sale de madre y se me olvida pagar, o me coge tonta y no me da la gana pagar, vaya). Que es parte del deseo, lo de no pagar, joder que, con tanto paréntesis, no me entero ni yo. Mentiría si dijese que no me lo creo, que yo paso de los horóscopos, que sé que Dios no existe y que lo de las pestañas es infantil, así que no lo haré. Lo de Dios (nótese que va ahora escrito con mayúsculas: es el acojone), lo dejamos para otro día, que me da yuyu que exista y yo decir aquí lo que pienso de verdad. La cosa. Siento afligiros con este arranque de optimismo, sabiendo como sabéis que más grande/grave/gorda será la caída. No sufráis. Será una hostia enorme, pero me levantaré. Odiaré a todo y a todos y a otra cosa. Escribiré como el culo (vaya novedad). Lo leerán tres masoquistas y tres amigos y ya. En fin. Que voy a arrancarme varias pestañas más, por si acaso se me ocurren más y mejores momentos que esperar. Que vaya bien el fin de semana a los terráqueos y a los de fuera, que vaya bien el calendario estelar.

3 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Chacha, arcánsame'l cacharro la leche. dijo...

Dos cositas, como dice la publicidad de seguros (repugnante dos veces): ¿Como qué culo? Que hay culos de Nobel - y lo contrario- Y la otra: tres amigos y tres masoquistas parecen seis, pero una condición no excluye a la otra.

Pilar dijo...

Es que si digo tres amigos masoquistas, se me ofende uno. Que siempre se ofende, también es verdad, por todo y con todos. Pero no estoy como para perder partidarios, que detractores hay por doquier.
Y sí, lo pasé bien y, sí, listillo, hubo tocamientos xd