sábado, 1 de octubre de 2011

La carta del Ministerio


El Ministerio de Asuntos Internos y Externos, Economía, Cultura, Gestiones, Sanidad y Reformas, consciente de estar saturado, decide por Decreto quemar todos los papeles que el único funcionario que queda amontona en su mesa 

HACE SABER

Que, tras la reducción de los ministros y ministerios, requisitos y acreditaciones, funcionarios y senadores, hemos notado que el país no va mejor, ni peor; que la economía se anima ligeramente pero no podemos ofrecer datos (empeñamos los ordenadores y suspendimos la suscripción a Internet); que el mundo gira, la luna sale a veces llena, a veces menguante, y a veces no sale; que las horas extras se suspenden por falta de funcionalidad del funcionariado en activo.

Que lo de las Universidades se gestiona solo; que cuantas menos reformas, menos papeleo, menos mareo y menos gasto en aspirinas y ansiolíticos; que hay menos fracaso escolar y menos divorcios y no hay colas del paro porque hemos cerrado las oficinas del paro para ahorrar.

Que sustituimos los robots por personas y todo va igual de mal, el desorden campa por doquier, igual que antes pero al menos ahora siempre alguien silba.

Que han aumentado los conflictos con la UE pero nos la trae floja porque los tres (el ministro, el funcionario y la limpiadora) no estamos para mamonadas y no sabemos inglés.

Que igual la anarquía se ha apoderado un pelín del país pero en verdad no se nota nada de nada.

Y consecuentemente a lo anteriormente dicho,

 DECIDE

El cierre indefinido de este estamento con la única condición de que no desempleen a la limpiadora que tiene seis hijos y el polvo es lo único que vale la pena barrer.


Quedan, emocionadas y agradecidas, las miembras del Ministerio de Todo.
Y ya sin protocolo ni obligaciones del lenguaje jurídico nos despedimos.

Hasta más ver.

PD: Hala, a vivir de los ahorros.


5 comentarios:

Unknown dijo...

Aunque lanzas ésto con aire tragicómico; es una lástima que nadie saque una cuenta de todo el desperdicio en gastos públicos en todas las dependencias y produzca una iniciativa para destinar todo éso a producir empleos e iniciativas ÚTILES.

Riforfo Rex dijo...

Esto debería guardarse como premonitorio. A veces uno piensa que los gobiernos son como los guardias de tráfico, cuando hay cola es porque hay un guardia de tráfico delante. Lo mismo sin guardia el tráfico es más fluido.

Anónimo dijo...

Ah, demasiado altruismo del ministro y el funcionario. Más que anarquía es fantasía. Saludos.

Pilar dijo...

Sí, pero estaría bien ¿o no?

Chiarina dijo...

¡Muy bueno, Cartaphilus! Aparte de los comentarios de los demás lectors, con los que estoy de acuerdo, anoto que pasé un buen momento leyendo tu escrito. Perdemos dinero, perdemos trabajo y muchas más cosas... pero espero que nunca se pierda la capacidad de ver las cosas desde una perspectiva humorística.