viernes, 13 de mayo de 2011

Sensatez borderline

Roberto Matta

Para no desconocerla diré mentiras, fingiré, trataré de ignorarla. Para no dejar de ser algo suyo, para reconocerla en su carne, en su alma, en sus labios, en sus ojos, olvidaré lo que pasa. Lo que sé que ocurre. No lo sabré.
Haré que no la veo en su ordenador; no miraré siquiera sus ojos cuando sonríen levemente y su semblante cambia y se sonroja. Saldré de la habitación, cerraré las puertas, daré volumen al televisor cuando la oiga decir “sí” y note esa franqueza en su voz. Y de nuevo “sí”; ese "sí" que alguna vez yo oí. Y otro último “sí” que ya sabe a sexo. Me dominaré para no preguntar qué pasa, si es que de nuevo la veo cerrar el portátil y llorar.
Para no desconocerla, la desconoceré. Saldré de casa. Volveré tarde. Dormiré en el sofá con la excusa de no despertarla. Olvidaré su tacto, por un tiempo. La evitaré. Forzaré una sonrisa solidaria. Buscaré consuelo en otra cama. Para no perderla y no olvidarla. Para poder perdonarla. Para no matarme o matarla.

2 comentarios:

Sucede dijo...

Me ha gustado mucho este "desastre".
Un gusto!!
Abrazos!!

Torcuato dijo...

Qué maravilla de micro. Cuanta emoción en tan pocas palabras y que bien escrito.
Besos, Pilar