de fuego.
Tarde y embriagada, llena de ti
de nuevo.
Afrodisiaca la noche;
afrodisiacas las brasas
de las palabras.
Lava que se abre paso por mí,
un juguete que te ama.
La memoria, afrodisiaca,
como tu acento,
como mi cuerpo
de espaldas
a todo sufrimiento.
Tu verbo enhiesto y desafiante;
parado a poco que te hable:
rozándome, mirándome.
Quiero cerrar los ojos,
untarme en el recuerdo,
sentir mis manos que son tuyas;
dejar que me guíes
a la locura, a la cordura,
al tiempo sin tiempo.
Quiero estar contigo;
en tu mundo cerrado,
terco,
desesperado.
Ya no hay verano ni invierno;
solo un lugar muy lejos,
un efímero momento,
delirio, dolor, sueño.
3 comentarios:
"Quiero estar contigo en tu mundo cerrado, terco"
Es amor de quien se entrega y no impone ni arrastra.
excelente!
saludos
Yun, Omar, abrazos.
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