jueves, 8 de marzo de 2012

Hitler y su distorsión de la realidad o Todos somos como el asno de Apuleyo pero sin su inteligencia

Las desventajas de no tener doble personalidad: no tener la enajenación exacta y necesaria para salir al mundo y saquear; hacer de las cosas una extenuante materia receptora de tu violencia. Hoy, atacar el mundo y sufrir un desgarro por un orgasmo intelectual. Cuando el anuncio de un Audi 6 es mejor que cualquier película y cantamos borrachos en los atestados campos de fútbol donde se dirime la historia...
La desventaja de no sufrir una metamorfosis, de no ser asno para que la gente, descuidada de tu presencia, hablara y actuara con la libertad y el albedrío siempre oculto de su vulgaridad, de su odio, de su debilidad; y todo esto se abriese paso hacia el cielo. (Un momento: ¡es lo que hacen!)
Como el perro que se relame cuando se cae al suelo un trozo de bistec, damos las gracias por las migajas de los demás.
Si la esquizofrenia no fuese moneda habitual. Trastorno dismórfico corporal. Trastorno obsesivo-compulsivo. Conductas violentas. Hitler y su distorsión de la realidad: se miraba al espejo y se veía como el cantante de Rammstein. Quién le podría culpar. 
Si el Holocausto hubiese producido un efecto mayor que la creación de un Estado judío moderno, un mero cambio de papeles donde un judío no será ya más la víctima. Nada que desde las alturas de los cielos, desde el Olimpo, el Paraíso,  el Valhalla, el Jardín del Edén o algún Spa no se pueda entender con la sabiduría y la distancia necesaria. Frótame aquí y te lo explico en checo. El mundo no es algo que se pueda cambiar. La Historia ya está escrita así que vive y deja vivir: sufre y déjame en paz. Además podéis elegir, ¿qué más quieres, tía? Elije pasar la vida de vigilante de un museo o en una cárcel de Colombia. Es fácil.
Todo es tan fácil que dan ganas de emborracharse con cicuta. Si no se justificara todo según leyes de la retórica. Si el orden jerárquico se pudiera quebrar. Si el tiempo se pudiera parar.
Todo va demasiado rápido. La media de documentación para una novela de 500 páginas es de treinta minutos (siempre olvidan dar las gracias a la Wikipedia en P&J). Los cuerpos se estilizan y las arrugas se planchan en un par de horas. Antes te pasabas la vida con hambre y haciendo deporte para que al fin la carne colgante te dijera: “Oye, es el camino hacia abajo donde los gusanos nos esperan, para de retenerme, perra estúpida”.
Todo ahora es muy rápido y, si no lo es, queremos que lo sea. Leer un libro en cinco minutos: que nos den el resumen o ver entre cabezadas la película. Unos segundos bastan para convencernos de comprar cualquier cosa. Unos minutos diarios para crear en nosotros el espejismo de pensar y tener una ideología. Y hablando de ella podemos enloquecer como si defendiésemos los colores de nuestra bandera en el nuevo campo de batalla, la guerra que acaece siempre en un campeonato de alguna mariconada. 
El deporte es sano. La democracia es la quintaesencia de la modernidad. Todos somos iguales. No se debe gritar. No merecemos protestar.
Afortunados los sumisos hijos de papá porque de ellos serán los Audi 6 y las camisas de Prada.
Bienaventurados los justos hombres cautos que nos avisan de que lo que callamos nos hace libres y lo que decimos nos esclaviza. Sí, es así, todo lo dicho, puesto en un cartel con una tipografía y una estética adecuada es una gran verdad.
Si nos permitieran volar, me lanzaría desde el piso treinta del edificio negro y me estamparía contra el cartel de la Semana Fantástica de El Corte Inglés.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Buen artículo de comentarios generales de vida, aunque te diré que es un tanto extremo lanzarse de edificios; no resuelves nada y dejas atrás una estela de culpa y depresión.
Por éso es mejor arreglar todo sin molestias. Budistamente. No haces nada, dejas que se arregle sólo, o que otro se encargue de hacerlo; mientras te la pasas en estado alfa de lo más chévere.
Lo demás es sólo ego, las arrugas , la vejez, todo éso ya venía incluído en el boleto, y si lo aceptas hasta te vez mas guay.
Hay que tomar con vibra positiva lo que has de vivir y alejarte de conflictos, que no son parte de tu karma.
Si consideras que no se está produciendo buena calidad de arte; entonces hazlo tú y aportarás algo necesario y válido.

Juanjo Rodríguez dijo...

¡Doy gracias a la vieja pequeñita que me enseñó a leer!
Hacía mucho tiempo que no la recordaba.
Me gustan tus estadios donde se dirime la historia y tus bienaventuranzas.