domingo, 18 de marzo de 2012

Hojas sueltas

Cuando se rompe el poeta queda, desarmada, su mirada perpleja

Como hombre prescindible y molesto para el devenir del mundo, vive al otro lado de una roca gigante, junto con otros inadaptados. Náufragos sin isla en un mundo de arena y barro. 
El artista pasa el tiempo solo. Es pobre y se afana en consignar la herejía, el sufrimiento, recrear el caos.
-¿Qué caos?
-El del otro lado.

El escritor perece entre roca y barro, ennegrecido del sol, vestido de harapos. Ya no se le acerca nadie. Los insectos son su alimento hasta que nota que no desea perder el tiempo comiendo. Escribe febrilmente, tampoco siente sueño. Después muere.

Entonces, los recolectores de palabras, hacedores de autopsias literarias salen de habitáculos sombríos como oscuras  bocas que de repente se han abierto, bocas negras sin dientes, bocas que exhalan un hálito fétido al tiempo que vomitan desconocidos.

No sé en qué pared se hallaban las cuevas. Nunca me importó que la piedra imperfecta tuviese labios. Labios tan finos que parecían meras grietas.
-¿Y toda esa gente?
-Del otro lado de esa pared de piedra.
-¿Entonces están todos ahí?
-Parece que sí. No lo sé. No me importa. Déjame mirar los trozos de papel volar hacia la nada.

-¿Sabes tú por qué no estamos en el otro lado?
-Somos una generación inexacta. Una transición fallida, un experimento que prefieren no recordar. El paso que se dio, pero no se llegó a dar, fue con estos pies. Ahora, el pasado recuperó el terreno y la generación ha sido desterrada.
- ¿Y el escritor?
-Un fallo diferente del sistema... Pero ahora veamos cómo vuelan las hojas mientras los gentiles saltan con esas ridículas redes y recogen hojas sueltas como piezas que después montarán mal.

3 comentarios:

Riforfo Rex dijo...

Yo prefiero pensar en "generación de transición", el cambio está por venir. Todo cambia.

omar enletrasarte dijo...

en las hojas sueltas, tal vez, su mejor escrito
saludos

Pilar dijo...

Gracias, Omar, me alegra que te guste.
R, eres un optimista, eso es bueno.
Saludos.